Ocho de los diez circuitos turísticos se dan en español y solo en 2012 recorrieron estos lugares ocultos bajo tierra 280.000 personas. La asociación aprovecha las paredes de los refugios para exponer documentos de la época.
En cada estancia de los búnkers se muestra su uso durante la Segunda Guerra Mundial y la posguerra; en algunas salas hay vitrinas donde se exponen máscaras de gas, artilugios de la guerra, libros y cartas.
La instalación de Gesundbrunnen fue la primera en la que Berliner Unterwelten -con 450 miembros y casi 90 guías- empezó a enseñar, el fascinante mundo subterráneo de Berlín.
La serie de documentales "Ciudades Bajo Tierra" y la película "El Hundimiento" dieron un gran impulso a este tipo de turismo que ha crecido en los últimos años.
Fuente:
Berliner Unterwelten
El País
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