Un monument man anotó en el informe:
Además, en el castillo se descubrieron habitaciones que contenían cuadros, tapices, esculturas, mobiliario de valor y documentos pertenecientes a dos conocidos marchantes de arte alemanes.Eran las colecciones de Karl Haberstock y de Hildebrand Gurlitt, propietario ilícito de un sensacional tesoro de 1.400 obras descubierto en Múnich en poder de su hijo, Cornelius. Un grupo de trabajo del Gobierno alemán está investigando la historia de las obras.
Karl Haberstock |
Es el coleccionista de arte más célebre de Europa. Era el marchante privado de Hitler, y durante años se adueñó de tesoros artísticos en Francia, Holanda, Bélgica, e incluso en Suiza e Italia, utilizando métodos ilegales, sin escrúpulos y hasta brutales.Sobre Gurlitt decía:
Es un coleccionista de Hamburgo con conexiones con las altas esferas nazis. Actuaba en nombre de otros altos cargos nazis y realizó muchos viajes a Francia, de donde se llevó a su país colecciones de arte. Hay razones para pensar que esas colecciones privadas estaban formadas por obras expoliadas de otros países. Gurlitt era uno de los marchantes de arte que trabajaban para el Führer.
Hildebrand Gurlitt |
En su interrogatorio, Gurlitt afirmó que tuvo que elegir entre la guerra y el trabajo para los museos y que nunca compró una pintura que no le ofreciesen voluntariamente.
Los nazis compraron y robaron obras de arte para llenar tres pinacotecas en la ciudad de Linz, el colosal museo de Hitler. Desde 1943, Gurlitt trabajó para Hitler a través de Hemann Voss, que estaba al frente del programa de "adquisición" y hacía de intermediario. También compró arte para otros museos alemanes y colecciones privadas.
Para saber más:
El País
Fold3
ABC