Mientras jugaban vieron a un hombre que los observaba a través de unos binoculares desde el lado opuesto del río Cane. "Le disparamos un tiro para ver como reaccionaría" recordó Kenneth más tarde. "Saltó del árbol y salió pitando por la carretera dejando una nube de polvo." Comenzaba la que se llamó la Batalla del Puente de las Bermudas.
Minutos después, el hombre regresó con la infantería que, comenzó a realizar disparos mientras los tres chavales les devolvían el fuego a través del río Cane. El "tiroteo" se prolongó durante media hora sin que se pudieran ver entre ellos debido a que la maleza los ocultaba. El padre de los niños aumentó su arsenal con petardos que sonaban como ametralladoras del calibre 50. Los "enemigos" establecieron cortinas de humo y prepararon un obús de 155mm. Finalmente un oficial del ejército, que actuaba como observador, se dio cuenta de que solo eran unos chavales con un cañón de juguete y petardos y ordenó el alto el fuego. Se acercó al padre y le dijo que ordenara parar a sus hijos. Los niños salieron corriendo hasta su casa creyendo que los detendrían y los encarcelarían en Fort Leavenworth.

"Esa es nuestra única reclamación a la fama," dijo Kenneth a un periodista de la revista Army en 2009. "Unos niños derrotamos al general Patton."
Para saber más:
Army
No hay comentarios:
Publicar un comentario