domingo, 17 de noviembre de 2024

Los Indios de Dunkerque

Tal y como se ha contado la historia, da la sensación de que en la Operación Dynamo solo participaron los británicos, y de pasada los franceses. Pero hubo más soldados de otras nacionalidades.

El imperio británico reclutó en sus colonias de Asia a millones de soldados para la lucha, y su intervención fue importante para la defensa y la posterior victoria de Gran Bretaña. Además, no hay que olvidar que la gran mayoría de esos jóvenes reclutados en las colonias lo hacían coaccionados. Por ello, resulta especialmente duro que en la historia se haya borrado la contribución que estos ciudadanos de las colonias. Todo con la finalidad de reforzar la equivocada idea de que la patria sola luchó contra el eje.

A pesar de que Gran Bretaña tiene tremendamente presente toda su historia militar a lo largo de siglos y muy especialmente su intervención en la Segunda Guerra Mundial, donde se alzaron como grandes vencedores, y conmemoran todas sus gestas, también demuestra una gran desmemoria en el momento de recordar toda su historia. Aunque eso tiende a ir cambiando, sobre todo con los Estados Unidos y poco a  poco con la intervención de sus propias colonias.

Ahora que el Reino Unido empieza a reconocer que quien luchó en la Segunda Guerra Mundial fue en realidad el Imperio Británico, en su conjunto se empieza a conocer la aportación de los indios en Dunkerque.

Debido las hambrunas que sufrió la India, de las que era conocedor Churchill,  muchos se alistaron voluntarios simplemente para poder comer. Los indios que fueron enviados a Francia en la fuerza expedicionaria y a Dunkerque eran mayoritariamente de lo que hoy es Pakistán, y de confesión musulmana. El número ascendía a 1800, los que llegaron a Marsella acompañados de unas dos mil mulas que transportaban el material. Gracias a ellos, las tropas estacionadas en la zona de Dunkerque recibieron provisiones y munición.
De las cuatro compañías que se encontraban en las playas, tres lograron ser evacuadas, pero los que quedaron en Francia tuvieron un mal final. Casi todos murieron en los campos de prisioneros.

En la Operación Dynamo se da gran importancia a los civiles que acudieron a la llamada de rescate de los soldados varados en las playas, a donde los grandes navíos no podían llegar y eran constantemente atacados por la aviación alemana. Pero en el 25% de los barcos mercantes ingleses la tripulación era mayoritariamente tripulado por marineros Indios, conocidos como "Lascars", por lo que en la evacuación también tuvieron un papel significativo.

Para saber más:
Globedia
El País
Blitzkrieg
La Segunda Guerra
Wikipedia

domingo, 10 de noviembre de 2024

Truco o trato y el racionamiento

Los estragos de la Segunda Guerra Mundial llevaron a establecer el racionamiento de multitud de productos y entre ellos se encontraba el azúcar, el ingrediente principal de las chuches que tanto gustan a los niños.

Truco o trato y la Segunda Guerra Mundial
Poniéndonos en contexto, la noche previa al Día de Todos los Santos se celebra en Estados Unidos, la noche de Halloween, una festividad de origen celta, el Samhain, su día de Año Nuevo, pero adaptada a la mentalidad yanqui y que se ha extendido por todo el mundo. Tradicionalmente, los niños se disfrazan y visitan a sus vecinos pidiendo golosinas diciendo: "Truco o trato" (Trick or treat). Ya en Inglaterra, durante el siglo XVI, los pobres salían a pedir limosna el Día de Todos los Santos y los niños tomaron como suya esa costumbre, igual que en España se solía pedir el aguinaldo en Navidad. Precisamente algunas fuentes establecen su origen en una tradición navideña estadounidense y canadiense de los siglos XVIII y XIX llamada belsnickling y ya olvidada. Lo cierto es que durante la edad media era común que los adultos dieran a los niños los "pasteles de almas" para que los pequeños rezaran por sus almas.

Los inmigrantes europeos, especialmente irlandeses, llevaron Halloween a Estados Unidos, convirtiéndose en una celebración muy popular y esas costumbres se adaptaron al nuevo territorio: las terroríficas calabazas con una vela en su interior proceden de la leyenda de un herrero irlandés que debía llevar un ascua ardiente dentro de un nabo por un castigo del demonio y tomó esa tradición el nombre de Jack O´Lantern. Como en América no eran muy comunes, los nabos se sustituyeron por la calabaza, como lo conocemos ahora. La expansión internacional de esta festividad se produjo a finales de la década de 1970 gracias al cine, especialmente tras el estreno de Halloween, de John Carpenter, una película ambientada en la víspera de Todos los Santos que supuso un referente del cine de terror.

Truco o trato y la Segunda Guerra Mundial
El "Truco o Trato" como lo conocemos hoy, alcanzó su total popularización en Estados Unidos tras finalizar la Segunda Guerra Mundial, cuando terminó el racionamiento y el azúcar y los dulces volvieron a estar disponibles y no se limitaba a dar a los niños manzanas o dulces caseros poco apetecibles, gracias a una campaña para la UNICEF en 1950. Esta actividad se desarrolló especialmente en los barrios populares de las grandes ciudades, donde era más fácil y seguro que los niños fuesen de casa en casa pidiendo golosinas. En las casas con las luces encendidas se los daban y los que no querían dar caramelos dejaban las luces apagadas. Con el tiempo el chocolate fue ganado terreno frente a los caramelos y en la actualidad es el duce estrella de Halloween. 

Un dato curioso es que los niños nacidos bajo el racionamiento de azúcar de la Segunda Guerra Mundial fueron adultos más sanos, ya que tuvieron una menor incidencia de diabetes tipo 2 e hipertensión.

Para saber más:
National Geographic
El País
CNN en Español 
Wikipedia
My Modern Met

domingo, 20 de octubre de 2024

Las niñas soldado de Hitler

Niñas que apenas pasaban de los diez años y que deberían disfrutar de juegos infantiles, fueron convertidas en soldados para luchar en los últimos instantes del III Reich ante el imparable avance de los aliados.

Las niñas soldado de Hitler
La inmensa mayoría de las jóvenes y adolescentes alemanas pertenecían a la Bund Deutscher Madel o Liga de Muchachas Alemanas (BDM) que, creado en la década de 1920, no tenía como finalidad la lucha armada. Fue creada como un modo de adoctrinamiento dentro del nacionalsocialismo para las nuevas generaciones de muchachas alemanas. En 1936 (tres años después de la llegada al poder de Hitler) era obligatoria la pertenencia a las muchachas arias. En la BDM las chicas recibían una educación que las preparaba como esposas, madres y amas de casa nacionalsocialistas: la cocina, la limpieza, la familia, el ejercicio físico y el cuidado de los bebes. La edad de las integrantes de la organización iba de los 14 a los 18 años. Antes de pertenecer al BDM, con 10 años, pertenecían a los Jungmadel (chicas jóvenes).

Inicialmente, las más jóvenes de la BDM y del Jungmadel ayudaron al esfuerzo de guerra recolectando dinero, así como ropa o viejos periódicos para Winterhilfswerk y organizaciones caritativas nazis. Las mayores eran voluntarias como ayudantes de enfermeras en los hospitales, o para ayudar en las estaciones de tren para asistir a los soldados heridos o los refugiados. Cuando aumentaron los bombardeos aéreos aliados, muchas chicas de la BDM se dedicaban a servicios militares y paramilitares, donde servían como Auxiliares de los cañones antiaéreos Flak, auxiliares de señales, operadores de reflectores y personal de oficina.

Las niñas soldado de HitlerEl adoctrinamiento de los jóvenes alemanes los había llevado a sentir una ciega devoción a su líder Adolf Hitler. Tras el desembarco aliado del 6 de junio de 1944, que se sumaba a la presión de los soviéticos en el Este, hasta los nazis más fanáticos veían que era irremediable la caída del III Reich. Aun así, el régimen nazi comenzó a exhortar a las jóvenes alemanas para que se ofrecieran voluntarias para defender la patria alemana.

Barbie Densk, que en 1944 tenía quince años:
Justo antes del ataque estadounidense, nuestro líder de grupo nos dijo: Chicas alemanas, ustedes son como los lobos grises y delgados de nuestra nación. Como lobos en el gran desierto, la hembra humana es también un depredador natural, proveedor y protector. Como lobos, recorrerán las sombras y no dejarán a ningún enemigo a salvo. Nuestro enemigo se ahogará en su propia sangre, y la nuestra si es necesario.
Habían consagrado su infancia y adolescencia a servir incondicionalmente al nacionalsocialismo y a su Führer. Ahora darían su vida por Hitler. El adoctrinamiento a que eran sometidas las niñas y adolescentes realmente no conocía límites.

Según una orden de Hitler, las niñas a partir de los 10 años debían ser entrenadas en técnicas de combate. Se las enseñó a manejar los Pazerfaust (antitanque), a realizar sabotajes y colocar trampas y minas, al igual que a actuar como francotiradoras.

Barbie Dansk:
A través de mis binoculares podía ver a los soldados enemigos. Cogí mi rifle. Las otras chicas me siguieron y comenzamos a disparar.
Las niñas soldado de HitlerPara los soldados norteamericanos que se enfrentaron a ellas, fue toda una conmoción. No tenían más remedio que devolver el fuego. Según contó un veterano soldado estadounidense:
Recuerdo un día que estábamos avanzando por una calle lateral, y sonó un disparo de un sótano. Uno de nuestros chicos fue asesinado. Tomamos el único curso de acción que pudimos y disparamos una bazuca por la entrada. Uno de nuestros hombres se arrastró dentro. Salió en estado de shock y dijo, ‘‘Jesucristo, hay una niña muerta’’.

Algunas chicas del BDM fueron reclutadas en los grupos de Werwolf, que tenían la intención de librar una guerra de guerrillas en las áreas ocupadas por los aliados. Una exlíder de la BDM, Ilse Hirsch, formó parte del equipo que asesinó a Franz Oppenhoff, el alcalde de Aquisgrán nombrado por los aliados.

Se desconoce el número exacto de muchachas que combatieron. Hay que tener en cuenta que cuando se unieron a la Cruz Roja, la Luftwaffe o el Werwolf, ya no eran miembros de la Bund Deutscher Madel, sino miembros de esas organizaciones.

Para saber más:
Hitler’s Girls: Doves Amongst Eagles, de Tim Heath
Bund Deutscher Madel
La Razón
Perú